Patrick Leinen, de la empresa Little iApps, ha presentado un aplicación para Iphone que ayuda a redimir los pecados. Salió a la venta la semana pasada por 1,99 dólares en Itunes, y según Leinen, pretende que los fieles se comprometan con la fe a través de la tecnología digital.
La cúpula de la iglesia católica norteamericana ha dado su visto bueno al invento, pero advierte de que tiene valor orientativo, y que en ningún caso puede convalidar la visita a un sacerdote tradicional. La iglesia católica en Reino Unido aún no ha tomado una decisión.
El Vaticano ha ido dando pasitos para no quedarse atrás en el fenómeno 2.0. Evidentemente, su web lleva ya años en el ciberespacio. Además, en 2007 abrió un canal oficial en YouTube y en 2009 desarrolló una aplicación para Facebook que permitía enviar postales digitales con la imagen del papa. El 24 de enero de este año, en su discurso sobre las comunicaciones mundiales, el papa Benedicto XVI admitió que el uso de la redes sociales no es un pecado per se, permitiendo su uso a los fieles católicos, teniendo en cuenta, eso sí, que "es importante recordar siempre que el contacto no virtual no puede y no debe reemplazar el contacto humano directo con la gente en cada nivel de nuestras vidas".
[Imagen: http://www.auladereli.es]
alfonsovazquez.com
ciberantropólogo
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